A mi entender, las
asociaciones que se crean en un pueblo, o mejor dicho, las diversas
asociaciones que se crean en un pueblo, o ya existen en un pueblo, tienen como
finalidad enriquecer el potencial creativo del
pueblo, de la localidad.
Ni qué decir tiene
que hay que dotarlas de un apoyo decidido y firme. Que deben ir de la mano de
la más alta institución de un pueblo, de una localidad. Que deben colaborar
conjuntamente. Que dicha colaboración debe de ser mutua. Entiendo que hay que
brindar a estas asociaciones un apoyo (repito) decidido y fuerte. Hago hincapié
en este aspecto porque de estas instituciones saldrán personas con ideas para
mejorar nuestro pueblo, porque de estas instituciones saldrán mejores ideas,
mejores proyectos, y como consecuencia de todo esto, crearemos una mejor
sociedad, para nuestro pueblo, para nuestra localidad.
El 23-10-11 tuvo lugar una exhibición de
Cetrería en la Ermita de San Isidro. Así lo pone en la revista Poblete +
cultura que ha distribuido la Alcaldía para los ciudadanos de Poblete. Me
gustaría limitarme a relatar los hechos, pero no puedo ser imparcial. Enfrentar
a los cazadores de Poblete y a los cetreros, me impide ser imparcial, me impide
la imparcialidad.
No se pueden organizar eventos al
TUN-TUN.
Antes que nada, hay
que informarse de los permisos, de la documentación que se precisa para exhibir
unas aves rapaces de caza en un coto privado de caza. No se puede, ni se debe
enfrentar a dos colectivos como son los cazadores y los cetreros. Ambos son
importantes. Ambos son necesarios. Si hay problemas por el lado que sea, se
deben de reunír con quién deban y desde luego buscar una
solución.
De lo que no soy partidaria, es de hacer como
en gastronomía: ROMPER LOS HUEVOS PARA HACER LA TORTILLA.
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